En cada 8 de Marzo “Día Internacional de la Mujer”, conmemoramos a aquellas más de cien obreras mártires, que en 1857, fueron a la huelga, ocupando una fábrica textil de N.York, dónde fueron encerradas e incineradas, reclamando la reducción de las jornadas de 14 y 16 horas de trabajo, a 10 horas.
Este 8/3, las mujeres del movimiento sindical junto al resto de colectivos de todo el país, se suman al paro internacional de mujeres para conmemorar y recordarle a la sociedad toda, que las democracias del mundo, siguen en deuda con nuestros derechos, recortando las conquistas logradas en la calle, con movilización y lucha.
Porque queremos una sociedad libre de violencia y acoso.
Porque queremos que nuestros niñas, niños y adolescentes coman dignamente. Dejar de tener un país donde la pobreza crece y se hace cotidiana.
Porque queremos trabajos y remuneraciones dignas.
Porque queremos un mundo donde no exista el hambre, ni la guerra ni el genocidio.
Porque creemos fervientemente, en la defensa de la Paz y en la defensa de la democracia, clave indispensable para lograr nuestros más caros objetivos.
Por esto y más, las trabajadoras paramos este 8 de Marzo, para visualizar, para concientizar, para reivindicar, que hay un mundo donde las mujeres estamos. Siempre estamos, en la elaboración del alimento diario, en la letra del documento, en la reivindicación de la Negociación Colectiva junto a nuestros compañeros
Estamos en la cocina, en los deberes de nuestros hijos, educando, enseñando. Guiando. Tambien estamos en en la asamblea, participando, decidiendo y construyendo.
Y cuando es necesario también tomamos las calles no solo por nuestros derechos. También por los derechos civiles. Cuando la democracia se vio en peligro las mujeres allí estuvimos en la fábrica en los hospitales, y también en las calles movilizadas. Y eso nuestro pueblo sabe.
Por eso no es hora de andar pidiendo permiso. Deberemos asumir los espacios que nos depara la historia y transformarla. Mujeres comprometidas con la defensa de sus logros y reivindicaciones.
Mujeres comprometidas con su tiempo y con su historia.