Junto a Congreso del Pueblo nace la esperanza de la reconstrucción del movimiento popular con carácter revolucionario, movimiento que los obreros y los estudiantes fueron protagonistas de su forja, puestos a prueba en la dictadura y en cada movilización donde la represión no se ausentó.
En este proceso de construcción y reconstrucción del movimiento comunista, debemos definir a qué tipo de organización aspiramos, como joven expongo ante ustedes la visión de Congreso del Pueblo respecto a las Juventudes.
¿Qué juventud queremos? ¿Qué juventud necesitamos? ¿Acaso una que se dedique a oír y repetir consignas? O más terrible aún ¡¿Una que sea simplemente la mano de obra fresca?! ¡¡No!! Queremos y necesitamos una juventud que piense, reflexione y sea crítica ante la vida, que desarrolle por sí misma su espíritu revolucionario, que forje su pensamiento en la discusión y en la fraternidad. En definitiva, una juventud viva.
Los jóvenes, así como en cualquier materia, deben instruirse en la teoría desarrollada por los grandes pensadores, donde se encuentran sintetizados cientos de años de experiencia obrera; es imperioso que los jóvenes se formen en la filosofía de los que aspiran liberar a los oprimidos. Aspiramos a una juventud culta pero integral, de nada sirve formarse en la más profunda teoría, si como personas, como seres humanos carecen de las cualidades fundamentales para construir un mundo mejor, sensibilidad, fraternidad, humanismo, solidaridad, respeto, etc. En Congreso del pueblo debemos cultivar y potenciar las cualidades humanas de los jóvenes.
En el proceso de formación es fundamental la reflexión, generar los espacios de debate sobre los temas en cuestión para generar una síntesis y construir una educación colectiva. Por último pero no menos importante, la acción política, la fuerza del marxismo surge de la unión de la teoría con la praxis, una teoría sin práctica muere rápidamente, una práctica sin teoría es vacía; desarrollar la teoría, actividades de propaganda y agitación a las masas, responsabilidades de organización, etc. En Congreso del Pueblo no hay algo que pueda hacer un veterano y no un joven, las responsabilidades se designarán en función del desempeño y no de la edad.
Nos dirigimos, por nuestra concepción leninista, hacia la formación de una organización autónoma e independiente de “Juventudes del Pueblo”, mas para eso todavía falta que corra mucha agua bajo el puente.
Hoy nuestro deber es organizar, formar y luchar para elevar la conciencia de nuestro pueblo y profundizar la discusión en el seno del Frente Amplio; contraponer a la teoría de la socialdemocracia, que tanto ha calado en nuestra fuerza histórica, la teoría de la Revolución de Rodney Arismendi; hoy nuestro deber es militar sin pudor, sin metáforas rebuscadas para evitar decir, sin titubeos, por el Socialismo y la Liberación Nacional.
Juventudes, ¡Unámonos bajo Congreso del Pueblo!