A 72 años de la Fundación de Aute ¿Cómo visualizan un Primero de Mayo diferente?
Bueno, primero agradecer a los compañeros y al periódico.
Sí, AUTE y 72 años de historia, que ya venimos cumpliendo 2 años en el marco de la pandemia, o sea que, el año pasado tampoco pudimos hacer un aniversario como corresponde, este año también nos encontró en este marco. El aniversario de AUTE es en el mes de abril, que en definitiva es un mes antesala al Primero de Mayo, nosotros siempre tratamos de hacer algunas actividades que sean preparatorias del Primero de Mayo. Nos complica, creo que la experiencia con respecto a la celebración de los Primero de Mayo, tanto el año pasado como este, en realidad es una muestra de lo que ha sido la dinámica sindical de todo el año pasado y este. Ha sido muy complicada, obviamente que hay una una tensión permanente con con lo que es la pandemia, lo que es lo real de la pandemia, que es real, pero también con lo que ha sido usada la pandemia, hay obviamente un aprovechamiento del Gobierno de lo que es la pandemia; y bueno, lo que nos ha costado a nivel de los sindicatos es desarrollar dinámicas de lo que estamos acostumbrados, de juntarnos, de movilizarnos, de estar en la calle, de plantearnos la asamblea, de generar los actos y el Primero de Mayo no escapa a esa situación.
Nosotros entendemos, en realidad no somos críticos de cómo se han realizado, porque entendemos que que hoy la propia gente, los propios compañeros son los que te te marcan un poco el ritmo, porque muchas veces no es que la dirección no quiera convocar a tal o cual movilización, sino que muchas veces son los propios compañeros, nosotros, por ejemplo, tenemos la mitad de los compañeros afiliados al sindicato en el interior del país y, bueno, muchas veces pasa que los propios compañeros no te vienen, entonces tenés que tomar en cuenta todas esas situaciones y esa esas condiciones que te marcan la propia realidad para hacer.
El Primero de Mayo para nosotros: un día de lucha, un día cargado de recuerdos, historia. Vamos acompañar a la actividad que se haga en el PIT-CNT, como hicimos el año pasado, lo que fue la caravana, en este año se le dará otro tenor, más que nada en el marco de la campaña en contra de los 135 artículos de la LUC.
Preservando las medidas sanitarias, nos agarra en el peor momento, estamos teniendo 70 uruguayos que están muriendo por día, que eso es real, es real.
Lo que también es real, es que nosotros no deberíamos de colaborar en un sentido político-sindical a la psicosis, deberíamos tratar de tener la calma suficiente para desarrollar nuestras luchas en el marco de la pandemia esa es la consigna que hemos tenido desde el año pasado.
En esta coyuntura de mundo, con una nueva pandemia y con un Gobierno de derecha en nuestro país, ¿Cuál es la reflexión de los trabajadores nucleados en AUTE?
Obviamente hubo un cambio en la conducción política del país, a partir de Marzo del año 2020,vino con un cambio general en la correlación de fuerzas del país, tanto en el lado de las clases dominantes como del lado de la clase trabajadora… y al toque vino la pandemia, pero previo de la pandemia, ya el Gobierno había sacado el decreto de ajuste fiscal el 11 de marzo del 2020, donde ahí marcó las condiciones de lo que va a hacer, después vino el presupuesto, vinieron los consejos de salarios, LUC mediante, eso fue dando forma también a lo que ha sido la respuesta que ha tenido el país en torno a la pandemia.
No todos los países han tenido la misma respuesta, tanto social como económica y política. Las condiciones que nos impone eso, están complicadas, porque hemos sufrido mucha resistencia para enfrentar todo el plan que ha tenido la derecha de imponer su proyecto.
Nosotros también desde AUTE hemos intentado en todo momento generar políticas sindicales que permitan nunca parar la rueda del sindicato: no convocamos a los compañeros irse para la casa, no hicimos paros sanitarios, tratamos siempre de motivar a que los compañeros, cuidándose,para que estén en la calle, estén presente. Ha sido una política que hemos tenido en el sindicato, que la mantenemos hasta el día de hoy. Sabemos que peinamos a contrapelo, pero es lo que tenemos que hacer; en ese sentido hemos desarrollado un montón de actividades que después más adelante las comentaré.
El PIT-CNT resolvió defender los puestos de trabajo antes que el salario. Se perdieron efectivamente 60 mil puestos de trabajo genuinos y además hubo rebaja de salario real. ¿Qué pasó? ¿Se puede reflexionar como que hubo un error en la estrategia?
Sí, nosotros en la última mesa representativa así lo planteamos, de hecho se terminó resolviendo antes de la discusión de la próxima ronda de los consejo de salarios, que la tenemos ahora en la vuelta de la esquina, hacer un balance de la anterior y hacer un balance del Acuerdo Puente.
Creo que no es poco lo que se votó en la mesa , porque en definitiva no es pasar raya y acá no pasa nada, nosotros indudablemente tenemos que hacer una dura autocrítica de lo que fue el Acuerdo Puente del PIT-CNT con el Gobierno por varias razones. Lamentamos haber tenido razón; nosotros dijimos como sindicato y también como Coordinación Sindicatos del espacio que integramos en el PIT-CNT, de que era un error firmar un Acuerdo Puente con el Gobierno sin nada a cambio.Se transó la rebaja salarial,se hipotecó la lucha salarial. Nosotros hicimos muchas propuestas, entre ellas, de que las condiciones estaban marcadas, era muy complicado pelear por salario en el marco del año pasado, pero por lo menos que el Gobierno se comprometiera a dos cosas: a brindar la canasta de servicio básico que pedíamos a través de la Mesa Coordinadora de Entes, para los sectores más vulnerables y a pagar la renta básica a todos aquellos uruguayos y uruguayas que lo están necesitando. Pedíamos que por lo menos el PIT-CNT se pusiera de escudo de toda la clase, de la que estaba desocupada, de la que estaba pasando mal y la que tenía laburo. Pensar como clase, si bien había complicaciones para pelear el salario, no regalarlo, así como se regaló. Pensamos que fue un regalo porque firmar el Acuerdo Puente, que en definitiva lo que se nos prometió fue que a costa de la rebaja salarial no iba haber perdida de fuente laboral y tampoco se cumplió: a la vista está, hoy tenemos no solo la pérdida de miles puestos de trabajo, sino que tenemos lo que ocasionó esa pérdida de miles puestos de trabajo, los puntos de pobreza que se incrementaron. La ministra Arbeleche habló como si fueran fruta y en realidad estaba hablando de miles y miles de uruguayos, más de 120 mil uruguayos que la mayoría son niños y mujeres, que pasaron a engrosar los índices de pobreza. Tenemos toda la precarización laboral, que se da con los compañeros que están trabajando. Y después nos comimos toda la rebaja salarial. Pero lo que sí quedó demostrado es que había alternativas, porque los sindicatos que se plantaron y dijeron “No vamos a acordar la rebaja salarial”, pudieron generar condiciones de lucha que les permitió al menos conservar en parte, no solo los beneficios y los derechos que venían de antes con la ultra actividad, porque eso también fue perdido en los consejos de salarios, porque también se hablaba de que por medio del Acuerdo Puente se iba a garantizar los beneficios y eso tampoco pasó, hubieron un montón de grupo en los consejos de salario, de un montón de ramas, que perdieron beneficios, perdieron salario y, perdieron empleo. O sea, que en definitiva lo único que pasó es que le generamos condiciones a las cámaras patronales del Gobierno para que se la llevaran de arriba. Esto merece un balance.
Y después lo otro, que también creo que hace referencia a este Acuerdo Puente, en el marco del plan del Gobierno apelar un diálogo nacional y un acuerdo nacional, cuando en realidad ni siquiera eso te dieron. ¿Y vos hiciste un Acuerdo Puente de rebaja salarial? Para nosotros fue muy negativo ese momento, estuvimos en contra porque nos pareció errónea la estrategia.
Para recaudar fondos en el Fondo Coronavirus, el Gobierno se metió con los salarios de los empleados públicos que ganan más de 120 mil pesos por mes y no con los altos salarios de los privados. ¿Esto crees que es una cuestión ideológica?
Sí, indudablemente es una cuestión ideológica, el Impuesto Covid ha sido un impuesto político, ideológico y no económico. De hecho están los números de lo que se recaudó el año pasado y están las proyecciones de lo que se puede recaudar con este, en ambos casos es menos de un 10% de lo que ha sido todo el fondo, o sea que, no es nada. Lo que sí ha servido, es desde el punto de vista ideológico, para poner el énfasis, convencer a la gente, de lo que había que ajustar, que el ajuste lo teníamos que pagar los trabajadores, fundamentalmente los trabajadores públicos.
Ahora se está discutiendo la pérdida de derecho con la pérdida de la licencia médica, tuvimos rebaja salarial, Impuesto Covid. O sea, como si hubiera un sector de los trabajadores, que éramos los privilegiados, entre comillas, y que ahí había que ajustar.
Esto no es una campaña que se la inventaron los blancos, esto viene de hace años, me acuerdo a Mujica criticando a los compañeros de ANCAP, ya hay varias perlas de este collar, pero ahora se profundizó ese ataque justamente porque hay un debate ideológico de “Quién paga la crisis”, entonces de esta forma no quieren poner impuesto en los privados, que en realidad concentra más del 80% de los salarios altos, no están en la parte pública, el problema es que abre una discusión que no quieren dar, clarito la dijo el presidente ya el año pasado, los “Malla Oro”; estamos hablando del 1% más rico en nuestro país, estamos hablando de las altas gerencias, estamos hablando del aspecto más tecnocrático, que son los que dominan nuestro país, donde están, no solo los patrones de la empresa representantes de las multinacionales en nuestro país. No quieren ponerlo a discusión, y por eso ni siquiera le van a tocar el salario a la parte privada. Entonces dicen: vamos a lo público, al trabajador que no tiene trabajo, al que gana poco, al que está precarizado, el que hace changas vea que el enemigo es el otro trabajador, porque en realidad no dejamos ser asalariados. Quieren poner el énfasis en esa discusión, de a dónde tienen que ajustar, entonces todo lo que han hecho contribuye hacia ese debate, por eso creo que es sumamente ideológico.
Cómo vienen llevando la militancia. ¿Y cómo están trabajando hacia la contención de los compañeros con más dificultades? De sus sindicatos y de otros sindicatos con los que se pueda ser solidario.
Sí, buenísima la pregunta porque en realidad en el marco de las complicaciones que tenemos, hemos tratado de desarrollar algunas iniciativas, de hecho el año pasado pudimos desarrollar unas cuantas. Nosotros armamos una columna de “Contagiando Solidaridad”, es un espacio que nosotros hicimos cuando explotó la pandemia, de colaboración por medio de donaciones a ollas y merenderos, también pusimos ollas nosotros, propias de Contagiando Solidaridad, en Montevideo y en varios puntos del interior. Ahí se formó una organización social donde participan: estudiantes, cooperativistas, sindicatos, compañeros/as. El 4 de Junio, cuando se realizó el Paro Parcial el año pasado, salimos una columna bastante importante y acompañamos el paro en Av. Libertador, después de eso acompañamos a los compañeros/as de SOOFRICA, que estaban en un conflicto duro, vinieron marchando hacia la capital el día 28 y 29 de Junio. El día 30 de nosotros hicimos una movilización de la Mesa Sindical Coordinadora de Entes, frente a la Torre Ejecutiva que fue muy grande. Después pudimos desarrollar y acompañar el paro de septiembre de 24 horas, donde se hizo un acto en elque nos encontramos, ustedes también estuvieron presentes en Canelones enfrente a SOOFRICA, que fue muy grande también. Realizamos una movida como AUTE,acampamos 5 días en frente del Palacio de la Luz, rechazando el presupuesto que venía con recortes para la UTE. Hicimos una recorrida nacional, hasta que nos dio el cuero y en el marco de la pandemia por varios departamentos, difundiendo la problemática de lo que estábamos viendo acá en UTE y en general en todo el país. O sea que, tratamos de buscarle la vuelta para realizar acciones que pongan en el debate público lo que está pasando, y en ese marco obvio que nos fuimos encontrando con un montón de situaciones, de todos esos números que arrojan las estadísticas, de gente que la está pasando muy mal. Hace poco vimos una situación horrible porque aparte nos tocó a los propios compañeros de AUTE, asistir a un niño electrocutado, en un barrio bastante carenciado, de Montevideo. Eso da la clara de lo que está pasando. Se prenden fuego los ranchos, las casas precarias, que ya estaban precarias, ahora están peor. Cuando hablamos de que crecieron los índices de pobreza e indigencia, no estamos hablando de gente que no llega a la canasta familiar… ¡Estamos hablando de gente que no tiene para comer! Entonces, estos números arrojan situaciones.
Nosotros como sindicato, ya lo venimos manejando como una política sindical, tenemos básicamente 3 principios. Uno, la independencia de clase. Dos, la lucha. Tercero, fundamentalmente la solidaridad. Nosotros ya veníamos desarrollando un montón de actividades y de iniciativa solidaria, ya sea por medio de la Brigada Aurelio Piccone, la que se dedica a tratar de dar una mano en reparaciones a las casas más precarias solucionando las instalaciones eléctricas, ya sea dando charlas para justamente los riesgos eléctricos en las viviendas, o ya sea la apoyatura de los conflictos. También a partir del año pasado, una vez que explotó la pandemia en esos primeros días de Marzo y Abril que todo el mundo se guardó, cuando surgió la necesidad, tuvimos que pasar a otro estadio de lucha que fue la olla, por ejemplo tuvimos 3 meses, Marzo, Abril, Mayo y hasta parte de Junio, entregando cerca de 1300 viandas por día, de lunes a domingo, llegamos a sacar más de 150 mil platos a través de Contagiando Solidaridad solo acá Montevideo, después teníamos olla en Minas, olla en Paysandú, olla en Maldonado, olla en Canelones, olla en Rocha. Ahí pudimos tener otra forma de de solidaridad, que en realidad, nosotros como sindicato no estamos acostumbrados, porque desde la crisis del 2002, uno se puede acordar que el pueblo se organizó y tuvo que salir a afrontar la situación, bueno, ahora estamos en una situación muy parecida, desde el punto de vista de la profundidad de la crisis. Y bueno, como sindicato tuvimos que apechugar porque también hay una visión de clase, nuestra masa afiliado iene resuelto el problema de la comida, tiene resuelto el problema de salario y de empleo en la pandemia, ahora, ¿Nosotros como sindicato que decímos? Nuestros afiliados no se van a quedar sin trabajo en principio, no perdieron salario y pudimos generar algunas condiciones en la interna con el tema del trabajo y todas esas cosas, ahora… ¿Qué hacemos como sindicato? ¿“Que la gente se cague de hambre entonces”? ¡No! Teníamos que poner al sindicato a disposición de la clase, y la clase estaba pasando mal, fue así que todos los recursos económicos y militantes los pusimos a disposición de eso por unos cuantos meses; de hecho después seguimos, hoy Contagiando Solidariedad se adecuó a la nueva circunstancia, tenemos un abasto que estamos llevando a cerca de 30-35 ollas populares y merenderos todas las semanas. En este momento tenemos una olla en el local de AUTE de Minas, tenemos una olla en el Marconi que está funcionando Contagiando Solidaridad, y seguramente se abra en Canelones nuevamente una olla con los compañeros de SOOFRICA, me había olvidado de mencionar, en Maldonado ha sido una olla sistemática que ha estado todo el año, ahora durante el verano, Enero y Febrero se había levantado y ahora vamos a comenzar nuevamente, a sabiendas de que ahí falta una pata muy importante, que es la pata de la responsabilidad que tiene el Estado y el Gobierno. Es increíble que el Gobierno esté pensando en dar apoyo a las ollas, es una contradicción en sí misma, en vez de preocuparte de gestionar el Estado para que dé respuesta a las situaciones sociales que estamos viviendo… ¡No! El Gobierno dice: “Está bien que eso siga funcionando así, yo voy y te pongo 1Kg de arroz”. No es la solución, acá las solución es brindar políticas económicas que sean anti-cíclicas, que pueda permitir un desarrollo productivo, que brinde trabajo a la gente, poner las empresas públicas a invertir, a generar empleo genuino, obras, infraestructura, porque ha sido así a lo largo de la historia de todos los países que han entrado en crisis, esto no lo inventamos nosotros. Hoy hay que ser más keynesiano que nunca, es solo tomar el ejemplo de los países que muchas veces nosotros criticamos, lo que pasó en Estados Unidos, despuésde las grandes crisis que tuvieron, el estado se hizo cargo, lo que pasó últimamente en Europa con la asistencia del Estado a las empresas que estaban fundidas, el estado se hizo cargo. Los propios países que son neoliberales, que son de derecha, que son los que promueven el libre mercado, son los que han dado esta respuesta que acá no se quieren dar. Acá tiene que ser el estado el que se ponga al frente de esta batalla en contra del hambre, en contra desocupación y obviamente que nosotros como empresa pública, las empresas públicas en general tienen mucho para dar en este marco, en vez de recortar, en vez de achicar, en vez de combatir a los trabajadores públicos, hay que dinamizar esa parte de la economía: Antel, UTE, ANCAP, El Correo, etc. Habría que invertir para desarrollar trabajo de calidad y que se desarrollen las infraestructuras, que es las que necesitamos en este momento para salir de este embrollo que tenemos.
Porque está claro que el 1% más rico, lo único que han hecho fue embolsar cerca de 2000 millones de dólares en las cuentas que tienen el exterior, el 1% más rico se hizo más rico y de ellos, indudablemente, sin duda, no podemos esperar nada. Deberían ser sí, los que larguen la torta, pero no lo van hacer, ya sabemos que son los explotadores, entonces nosotros tenemos que reivindicar que el Gobierno, a través del Estado, tenga políticas que puedan paliar esta situación.
Hace un tiempo es público: el sindicato ha planteado una readecuación bajando las tarifas del sector. Contrariamente, nos encontramos con que se han incrementado. ¿Se sigue sosteniendo la posibilidad de poder bajar los costos para la población?
Sí, estamos convencidos de que sí. El tema de la tarifa eléctrica, obviamente ha sido tema de discusión hace mucho tiempo, nuestro sindicato históricamente ha planteado respecto a la tarifa y en las cuestiones generales, queremos hacer hincapié en la la historia de AUTE, los compañeros que nos precedieron, toda la vida fue un sindicato que se preocupó por las cosas del país, no ha sido un sindicato corporativista. Nosotros hemos recogido esa mejor tradición que ha tenido nuestro sindicato y en estos últimos años hemos tenido la constancia de meternos en los temas del país; uno de los grandes temas del país, obviamente es como se distribuye la riqueza, y parte de la distribución tiene que ver con la rentabilidad de las empresas públicas. 100 años de capital público acumulado, las primeras empresas públicas datan de principios siglo pasado, tenemos basta experiencia de lo que son y su papel en la sociedad.
Obviamente que la tarifa pública de electricidad, con el peso que tiene la electricidad en la casa de cualquier uruguaya/yo, tiene mucho que ver con esa distribución de la riqueza, por eso que nosotros planteamos una diferencia de cómo se ha planteado la discusión de la tarifa. Nunca hemos dicho que la tarifa eléctrica sea cara, decimos que la tarifa eléctrica es injusta. Tenemos un pensamiento, como hemos tratado de pensar las cosas siempre, desde un punto de vista de clase. Porque Un Solo Uruguay plantea que la tarifa eléctrica es cara, hay sectores de la derecha que han hecho campaña con la baja de los costos del Estado y sobre todo que la tarifa eléctrica. Ahora, nosotros decimos que es injusta porque la estructura de tarifas eléctricas, en nuestro país, hace que el trabajador/ra está en una casa, subvencione con su tarifa, el pago de los grandes consumidores en nuestro país, porque hoy las casas de familia están pagando el doble, en materia de plata, de lo que le vale la tarifa a un gran consumidor. Lo que hace este último es lucrar con la tarifa eléctrica, porque estamos hablando de las grandes empresas, las grandes superficies, los shopping, los grandes supermercados, los grandes industriales y el agronegocio, entonces, los grandes empresarios de nuestro país están pagando menos el costo de lo que pagas vos, lo que pagamos todos en nuestra casa. Lo que ha pasado, lamentablemente, es que frente a reclamos, tanto al Gobierno anterior como éste, es seguir profundizando esa injusticia, porque por medio de decreto con descuentos comerciales que le hacen a los arroceros,lácteos, a los grandes capitales del Agro de nuestro país, siguen profundizando esa injusticia se da en la tarifa eléctrica; cuando han salido la Confederación de Cámaras Empresariales, Un Solo Uruguay, a pedir que bajen el costo del Estado, le han dado bola y le han sacado decretos para bajar la tarifa. Ahora, todavía seguimos esperando que le bajen la tarifa, como han prometido por medio del cambio de la matriz energética, a la gente.
Nosotros como comisión hemos dicho que se puede, de hecho nosotros hicimos una propuesta hace dos años, que seguramente está guardada en el cajón, de sacarle el IVA a determinado consumos básicos,aprox un 20% de rebaja en la tarifa, a la gente que más lo necesitaba, porque hay una relación directa, si bien no es lineal, hay una una tendencia de la cantidad de consumo con tu estilo de vida y con tus ingreso; la generalidad es que si vos tenés un estilo de vida y un ingreso en tu casa bajo, obviamente que vas a tener un consumo mucho menor, que una casa que tiene muchos más ingresos, entonces una propuesta concreta, hasta cierto nivel de consumo, sacar el IVA y eso se puede hacer sin afectar las cuentas de UTE. Lamentablemente, las devoluciones hasta este momento, parejo de la mayoría del espectro político, ha sido una negativa. Lo que sí hemos recibido son aumentos, algunos inclusive por arriba de la inflación y justamente un ajuste sanguinario el año pasado, que en el marco de la pandemia se ha aumentado las tarifas, eso es matador.
¿Qué se puede decir con respecto a la energía eléctrica como matriz productiva de cara a un proyecto soberano?
El cambio de la matriz energética ha sido una discusión tremenda. Con la comisión multipartidaria que se hizo en el Parlamento encabezada por el Frente Amplio, pero con todos los partidos políticos, en el año 2008 no pegaron una; ha habido acuerdo multipartidario con el tema Energía, que al margen de esto, no fue el último el único acuerdo multipartidario, se hizo en seguridad, en educación, etc ¿Qué quería decir esto? Que los Partidos políticos se juntaron, dijeron: vamos a hacer “esto y esto”, “este” va a ser el cambio de la matriz energética de acá a 50 años. El primer problema que tuvo eso es que las organizaciones sociales, el campo popular y social, estuvo ausente en esa discusión. El segundo problema, es perdimos la oportunidad histórica como país para hacer este cambio de la matriz energética, porque en definitiva, la discusión no estaba en la fuente, si era petróleo o si era viento, si eran los molinos, si eran los paneles, si era a gas; esa discusión tenía que ver, pero el fondo del asunto siempre está en quien tiene sartén por el mango de la fuente. Lo que se hizo fue cambiar figuritas, antes dependíamos de los consorcios internacionales y el commodity internacional del petróleo, y ahora dependemos de las multinacionales y de los burgueses nacionales que nos venden la energía, en definitiva, hoy tenemos que pagar 600 millones de dólares anuales al “taca-taca”, no importa si llueve, si no llueve, si hay petróleo, si no hay petróleo, no importa, 600 millones al taca-taca a las arcas de los generadores privados, que son los mismos 1% que mencionaba anteriormente: los Otegui, los Mailhos, los Zerbino, los Raquet, etc; te puedo nombrar a las históricas familias burguesas en nuestro país, que son las que tienen negocio eléctrico, las mismas que echaron a los compañeros de FRIPUR. Eso fue lo que se proyectó por 5 décadas. Teníamos una oportunidad histórica, porque no se puede cambiar la matriz eléctrica todos los días, entonces el país dijo Vamos para allá, y ahora estamos ahí, ya hay un tope en las medidas que se hicieron en la eólica porque se sobre genera, hoy tenemos más energía de la que necesitamos. Se preveía instalar en el país aproximadamente 300 megas eólicos, hoy estamos en 1600 megas eólicos… ¡Si habrá sido bueno el negocio! Yo me imagino, no sé, una cadena de Whatsapp entre los burgueses: “Vayan a Uruguay que están dando franquicias”, le pedís un préstamo, el Uruguay te sale de garantía, porque el capitalista no ahorra, el capitalista si tuviera que ahorrar todo el capital… ya sabemos que pasaría gracias a Marx; entonces pide un préstamo, se lo dan y la garantía será el estado uruguayo, que como bien sabemos, teníamos buena categoría, la “categoría A” que siempre Astori salía a hablar de ella; luego de pedir un préstamo, instalaron los molinos, el Estado uruguayo se comprometía para pagarte y a comprarte toda la energía que genere y la que no genere. Teniendo todo esto en cuenta ¿Cómo no va a ser un negocio redondo?
Ahora, si yo te pregunto, vos sos un burgués que vende zapatos. Armas un proyecto y vas a instalar tus inversiones en Uruguay. ¿Tenés garantizada la venta por 50 años? Desde luego que no, ahora, en energías sí, entonces, ¿Cómo no iban a venir? Seguro, empezó la oferta, y ahora tenemos 1600 megas. Eso pasó también y está pasando ahora con la fotovoltaica, que es una de las cosas que nosotros queremos afrontar, porque no queremos caer en el mismo error. Hizo que cambiara de mano. Perdimos soberanía. Quedamos embretados enormemente con el tema de la caja de la UTE. Y vuelvo a decir que como país, se perdió una oportunidad histórica, porque lo que vendría a ser un costo cero después de la inversión, o sea, vos amortizas la inversión de los molinos, después todo es costo de mantenimiento y operación, ahora, eso no está en manos de UTE, solo el 9% de toda la energía eólica que se instaló, está en manos de UTE. Por tanto, tenemos un problema, soberanía y tenemos un problema político, también hay que decirlo, cuando nosotros salimos a denunciar estas cosas, de parte del propio movimiento sindical se nos criticaba. Puede haber una cuestión de que no nos creían, puede haber una cuestión de que no nos tenían confianza, no sé, la historia es que lamentablemente tuvimos razón. Indudablemente ahora tenemos un problema con esto, nosotros estamos tratando de generar una discusión que con la pandemia obviamente se cortó, pero que venía de la mano de hacer un estudio del vencimiento de los contratos que son a 20 años, los contratos con los privados, y a partir del vencimiento del contrato, la posible no renovación de su contrato, que pasen a manos de UTE y poder recuperar parte de esa soberanía que perdimos. Y como el modelo de negocio de la energía eólica está prácticamente agotado, ahora se está migrando al modelo de la energía fotovoltaica, los paneles solares. En este sentido nosotros queremos agarrar ese tema, ya hemos planteado a la UTE y a la OPP poder discutir este tema en una mesa de trabajo, para no cometer los mismos errores que se hicieron con la energía eólica; estamos reivindicando una inversión que la UTE tiene que hacer de 70-80 megas en paneles solares, que tienen que ser instalados en la nueva planta de Punta del Tigre, de ciclo combinado que tenemos en San José, y ahí poder empezar a equilibrar un poco la balanza, al menos de lo que la energía renovable se refiere, que UTE empiece a invertir en energía renovable y poder empezar a tener una contrapartida contra los privados, con el precio, con el mercado, porque si no te ponen el precio que quieren, te venden la energía que quieren, entonces, está bien, no les gusta el monopolio público, pero ahora tienen el monopolio privado.
Sabemos que la lucha de clase es con y sin cuarentenas. ¿Qué estrategias se deberían delinear como PIT-CNT, para estar a la ofensiva en estas contiendas de lucha para mantener los derechos y ganar nuevos?
La primera es no salir con los cantos de sirena que nos marean el coco, porque hemos salido al “desnorteo total”, hemos tenido una falta de brújula, hemos salido al voleo. Más que nada con la posición sobre la pandemia, nosotros como sindicato, hemos sido muy estudiosos, hemos tenido la oreja bien grande para escuchar el sentimiento de los compañeros con respecto a la pandemia y hemos tratado de desarrollar una política sindical que prevea las condiciones de trabajo, que dé respuesta a lo que los compañeros plantean en el desarrollo de su trabajo durante la pandemia, pero también hemos empujado a que si bien hay pandemia, también hay lucha. Siempre tiene que estar esa lógica de que; si hay trabajo asalariado, hay explotación, si hay explotación hay lucha, entonces en ese sentido, creo que nos ha faltado como PIT-CNT tener un rumbo, porque hemos tenido poca capacidad de poder plantear cosas con cabeza propia. Y lo decimos claramente porque también lo hemos dicho en la propia mesa representativa, nos ha faltado mucha independencia de clase con este tema y hemos salido detrás de los discursos de otra gente, que no está bien. Eso creo que ha confundido también a los compañeros porque, el trabajo de los grandes medios de comunicación, la psicosis que se forma… vos pones el Canal 4 y dicen que si salis a la calle te vas a morir, ahora si nosotros a eso le sumamos que pedimos cuarentena obligatoria, de que no hacemos determinadas cosas por la pandemia, no se puede hacer nada, tenemos que poner un límite. Cuidémonos, pero tenemos que dar otra señal,una clara de que no se puede parar las rotativas y que el sindicato y el PIT-CNT tienen que seguir funcionando.
Lo segundo, es un debe que tenemos en el movimiento sindical hace muchos años y también nosotros como AUTE, es la disputa hegemónica, y dentro de ésta no hemos podido generar elementos contrahegemónicos, y uno de los elementos fundamentales es la disputa en la comunicación. En el Movimiento Sindical Uruguayo, si hay algo en lo que venimos fallando es en la disputa de la comunicación. ¿Cómo puede ser que en todos estos años tengamos un canal con una señal de ajuste? Si, tenemos un canal del PIT-CNT con una señal de ajuste, y no lo usamos. Ahí la visión de muchos compañero/as, en la interna del PIT-CNT ha sido que en los periodos anteriores no era necesario. Nosotros estamos en desacuerdo con eso, nosotros pensamos que la clase trabajadora siempre tiene que tener una voz propia, de expresión. Hoy, las redes sociales, los canales de comunicación, la tele, la radio, es como se mueve el Siglo 21. Si no entrás en ese baile y realmente das la disputa ahí adentro también, aparte de la disputa clásica en la marcha, en el volante, en la ocupación, estás dejando de lado gran parte de esa disputa hegemónica, hoy son los medios de derecha y burgueses quienes le llegan a los trabajadores con un mensaje utilizando los medios masivos.
Lamentablemente nos agarró la pandemia desarmados en este tema. No teníamos un “know-how”, como se le llama ahora, un “saber hacer” donde vengamos con un trajín con este tema, entonces nos agarró, nos tuvimos que ir todos a nuestra casa y ahora ¿Cómo nos comunicamos? ¿Quién nos pasa línea? ¿Cómo bajamos los informes? Quedamos a media campana, yo creo que el tema comunicación aparte de la línea clara, el tema de la comunicación, creo que hoy es muy importante y necesitamos un esfuerzo mancomunado de todo el PIT-CNT en ese sentido, pero con una línea clara de adónde vamos y el tema de la independencia, de lo que se piensa, lo que se dice y lo que se hace, a nosotros nos parece fundamental, porque de nada nos sirve tener herramientas sindicales que repliquen el pensamiento de otro.
Históricamente el movimiento popular ha marcado la agenda en cuestión de derechos, y el freno siempre lo ponían los sectores más retrógrados. En estos momentos, donde la derecha es la que la que se impone con la LUC, la reforma a la Seguridad Social, el desmantelamiento de las políticas sociales y el ajuste. ¿Qué perspectiva tiene AUTE con respecto a la reforma de la Seguridad Social, el movimiento pro-referéndum y la LUC?
Respecto al referéndum, es sabida la posición de AUTE, nosotros teníamos una posición de ir contra toda la LUC, porque habíamos definido a la LUC como uno de los vehículos fundamentales, bastiones de este proyecto que lleva adelante el Gobierno de ajuste. Entonces, para nosotros era una herramienta para identificar el ajuste, pero a su vez, metodológicamente también era mucho más sencillo explicar la LUC yendo contra toda, que contra una parte. Ahí tuvimos una discusión, aunque como se sabe, se resolvió por 135 artículos, nosotros como AUTE, orgánicos como siempre, estamos haciendo campaña para derogar los 135 artículos. Pero está muy complicada, la pandemia ha hecho estragos en la campaña, es evidente, porque a parte es una campaña del mano a mano. No hay que bajar los brazos, pero está brava, y venimos corriendo de atrás con el tema de la firma, también han habido errores propios, nosotros estuvimos 4 meses discutiendo esto de la LUC, 4 meses en la interna del PIT-CNT, también tuvimos una serie de mesas representativas; después todas las cosas que van pasando, que se enreda bastante la piola, porque esto último que salió de pedir la prórroga, es totalmente entendible el planteó, pedirla era contraproducente porque era una muestra de debilidad y que no venía muy bien, aparte que era inconstitucional, porque en realidad, a diferencia de lo que había pasado en las elecciones departamentales, ésto está en la Constitución y las elecciones están reguladas por el reglamento electoral. Entonces, sabemos que hay muchas cosas para resolver, estamos convencidos de que es nuestra herramienta y la vamos a defender a muerte a capa y espada, entonces, orgánicos hasta la médula.
Con respecto a la reforma de la Seguridad Social, esa es la madre de la reforma del ajuste, porque en definitiva, el capital hoy se tiene que reestructurar para no perder su tasa de ganancia y la forma más rápida, más directa, que tienen ellos para hacer caja y cambiar parte del Estado, como están haciendo en la región, es una gran reforma del Estado a través de la LUC, es mediante la reforma de la Seguridad Social. Porque obviamente que no implica solo las jubilaciones, hay un montón de cuestiones que se ocupa el BPS como tal, que es a por lo que vienen, son derecho, son prestaciones, y obviamente que estamos hablando de que todo va enfocado a los sectores más humildes, porque casi todas las políticas que tienen atención a la primera infancia, enfermedades y un montón de particularidades más que atiende el BPS. Y después obviamente todo el capítulo que se abre, que tampoco quieren discutir, es el tema de la caja militar, es ahí el punto porque acá es sencillo el tema, si se toca la caja militar se termina el déficit y listo, no hay mucha vuelta, el problema que no lo van a hacer, no lo quieren hacer. Y bueno, nosotros estamos en contra, estamos en contra de lo que se está planteando, nosotros estamos trabajando con los compañeros ATSS, sindicato del BPS, integrante de la de la Mesa Sindical Coordinadora de Entes, venimos trabajando bastante este tema, se han hecho algunas placas de denuncia ya con algunos temas que están en debate, posicionarnos en contra de de la comisión de expertos y los resultados.
El plantear hoy que se está de acuerdo con una reforma de la Seguridad Social era equivocado, porque en realidad la reforma era esta, no había otra reforma, entonces, era más fácil del punto de vista de clase entender el debate, posicionarse en contra de la reforma del capital, que decir: “No, estamos acuerdo con la reforma, pongámonos a discutir” porque sabíamos que estamos jodidos con la correlación de fuerzas, de hecho, se termina votando en el Parlamento esto, es uno de los artículos que no está para derogar, entonces, más complicado estamos hoy con el tema de la correlación de fuerza, pero la vamos a pelear, estamos apoyando a los compañeros que más la tienen clara con esto, que son los compañeros del BPS. Pero es “La Reforma” más importante de este periodo, mucho más que otras reformas que se están considerando, porque de hecho lo han hecho en otros países, algunos con resistencia, otros con el acuerdo, pero no es nuevo, esto es una receta que la van a aplicar en Uruguay, ya aplicada en América Latina. Es la receta del Fondo Monetario y del capital, lo vemos muy perjudicial.
Nosotros vamos a seguir en esta lógica de seguir en la lucha, tratando de dinamizar las luchas que podamos, apoyar a los compañero/as de otros sectores y del resto de la clase que la están pasando muy mal, y tratar de generar propuestas y debates, ponerlos en la agenda del debate público, que es lo que hemos tratado de hacer con todos los temas que tenemos. Cuenten con AUTE para lo que sea en ese sentido, como siempre.
Muchísimas gracias.