Tabla de contenidos
La contradicción del capitalismo
“La historia de toda sociedad hasta nuestros días no ha sido sino la historia de las luchas de clases”. (Karl Marx y Friedrich Engels, “Manifiesto Comunista”, 1848). Hay dos grandes clases en lucha permanente: la burguesía y el proletariado. La primera clase es dueña de las fábricas, de las herramientas, de la materia prima y del capital para invertir, y rentabilizar. La segunda clase carece de todo eso, pero posee su propia fuerza de trabajo, que vende por lo necesario para garantizar su subsistencia: el salario.
Aunque los proletarios generan la riqueza, es apropiada por los burgueses. Esta desigualdad lleva a que una minoría acumule casi toda la riqueza, dejando a la mayoría con mucha miseria. Las 85 personas más ricas, poseen el capital equivalente a los 3 mil 500 millones de personas más pobres del mundo. Pongamos un ejemplo gráfico: para que una sola cuadra de un barrio viva con extremos lujos, África, Latinoamérica y mitad de Asia deben vivir en la miseria.
A esto Fidel decía en la ONU: “¿Por qué unos pueblos han de andar descalzos, para que otros viajen en lujosos automóviles? ¿Por qué unos han de vivir 35 años, para que otros vivan 70? ¿Por qué unos han de ser míseramente pobres, para que otros sean exageradamente ricos?”.
La unidad del pueblo para superar el capitalismo
Para acabar con el capitalismo, este sistema que produce tanta miseria e injusticias, los proletarios nos hemos de unir con el resto del pueblo, debemos forjar una alianza con los campesinos, con los intelectuales y con los pequeños comerciantes. Defendemos el concepto de pueblo, y la contradicción de oligarquía-pueblo en el sentido marxista-leninista. Decía Lenin en El Estado y la revolución:
“Una revolución “popular”, que arrastrase al movimiento verdaderamente a la mayoría, sólo podía serlo aquella que abarcase tanto al proletariado como a los campesinos. Ambas clases formaban en aquel entonces el “pueblo”. Ambas clases están unidas por el hecho de que la “máquina burocrático-militar del Estado” las oprime, las esclaviza, las explota. Destruir, romper esta máquina: tal es el verdadero interés del “pueblo”, de su mayoría, de los obreros y de la mayoría de los campesinos, tal es la “condición previa” para una alianza libre de los campesinos pobres con los proletarios, sin cuya alianza la democracia será precaria, y la transformación socialista, imposible. (…) Consiguientemente, al hablar de una “revolución verdaderamente popular”, Marx, sin olvidar para nada las características de la pequeña burguesía (de las cuales habló mucho y con frecuencia), tenía en cuenta con la mayor precisión la correlación efectiva de clases en la mayoría de los Estados continentales de Europa, en 1871. Y, de otra parte, constataba que la “destrucción” de la máquina estatal responde a los intereses de los obreros y campesinos, los une, plantea ante ellos la tarea común de suprimir al “parásito” y sustituirlo por algo nuevo.”
Mantiene vigencia la necesidad de unir al proletariado con el resto del pueblo, que difiere en composición al pueblo ruso del siglo pasado, pero que preserva la unión* por el hecho de que la “máquina burocrático-militar del Estado” las oprime, las esclaviza, las explota.*
La organización del pueblo
La unidad no surgirá de manera espontánea, como demuestra la historia. La pequeña burguesía, influenciada por la retórica de la oligarquía, suele aspirar a reemplazarla. Es imprescindible un Partido de nuevo tipo que eleve la conciencia de los distintos sectores del pueblo, mostrando cómo la oligarquía busca aplastar al resto de la sociedad, y señalando que los intereses de la pequeña burguesía están más alineados con los del proletariado.
Uruguay tuvo larga experiencia de forjar esa unidad, con la unidad sindical en la CNT y la unidad política en el Frente Amplio. Pero si se pierde ese constante trabajo de elevar la conciencia, retrocedemos a los estados previos, donde la pequeña burguesía vuelve a aspirar ser relevo de la oligarquía y se desvía de los intereses del pueblo.
En ese sentido se fundó Congreso del Pueblo, para construir el partido del proletariado capaz de unir y organizar a todo el pueblo, “que reconstruya el carácter antiimperialista y antioligárquico del Frente Amplio y que aspire a ser vanguardia del proceso de cambios en el Uruguay, arraigada profundamente en las causas populares, sobre todo en la clase obrera y los más pobres, que sea capaz de defender las conquistas alcanzadas y a la vez forjar la fuerza social y política de la revolución Uruguaya.” (Encuentro de CP, 2022)